6.12.2004
ELLA SE HA ido.
¿En qué momento se da cuenta uno de que la ausencia se ha vuelto definitiva?
Con la propiedad de una mancha de aceite que se extiende corroyéndolo, inundándolo todo, se propagan las certezas.
Como una flor de aire que marchita sus pétalos entre mis manos: así es la ausencia.
Como yo mismo, apenas un fantasma.
No estás.
No estás: tu rastro evaporado, mi desolación.
¿En qué momento se da cuenta uno de que la ausencia se ha vuelto definitiva?
Con la propiedad de una mancha de aceite que se extiende corroyéndolo, inundándolo todo, se propagan las certezas.
Como una flor de aire que marchita sus pétalos entre mis manos: así es la ausencia.
Como yo mismo, apenas un fantasma.
No estás.
No estás: tu rastro evaporado, mi desolación.